Becenesplendor es mi proyecto desde hace casi ya dos años. He recopilado 31 imágenes de la ciudad de Barcelona, la idea principal era fotografiar zonas abadonadas donde lo esencial fuera el silencio y la soledad, empezando desde el centro de la urbe cruzando la ciudad hasta llegar a los barrios del Singuerlín, Montjuic y la Verneda hasta llegar al linde con San Adrián del Besós.

Buscaba mostrar la cara más reservada de Barcelona, calles sin murmullos, plazas que en cualquier instante serían el escenario de un último duelo, cruces de calles, carreteras..., en definitiva, el paisaje tal y como yo lo entiendo.

Buscaba quietud en barrios en estado de coma cuyo silencio muere por los pasos de una chica que mientras saca la basura aprovecha para fumarse un cigarro, el ladrido de un perro encerrado en el interior del coche. El silencio expiraba también por el trabajar de las máquinas diésel rompiendo en el cielo..., no lo esperaba, la solución: dejarme acompañar por la realidad y así fotografiar el verdadero esplendor de Barcelona donde puedes cruzarte con cinco familias sin esperarlo y al cruzar dos calles encontrarte en una esplanada olvidada la cual solamente es despertada por los chirridos de las ruedas de un oxidado tren de mercancías, al miamo tiempo hubo zonas donde esperaba cruzarme doscientos turistas y sucedía lo contrario, el quebrar de la goma de mis zapatillas alteraba mi sensación de tranquilidad.

Con Becenesplendor he intentado mostrar los espacios tal y como son, como si formaran parte de un plano cinematográfico..., amplios, llenos, insonoros, íntegros al mismo tiempo que desgarrados y olvidados, para mí, inolvidables. Albert Bonsfills nace en Barcelona en 1982, a los dieciocho años descubre gracias a su madre y un amigo el mundo de la fotografía con una Minolta compacta de 135 mm., sus primeras imágenes tratan de la Barcelona más turística ya que las tomaba aprovechando que trabajaba como chico de los recados en una empresa química de Vía Layetana, trabajo que compaginaba con los estudios de diseño para la automoción, sin apenas enterarse cada fotografía deja de ser un sueño para ser un instante encontrando en el olvido su verdadera forma de pensar. Sin darse cuenta la fotografía llena sus momentos muertos y con el tiempo hace de ella un mundo aparte, el suyo, un sitio al que se entrega por completo.

Estudia fotografía en el IEFC (Centre d'Estudis Fotogràfics de Catalunya) durante cuatro años, de mientras trabaja como asistente y realiza trabajos por encargo, tanto de moda como de reportage social.

Se considera auto-didacta, le atrae la complejidad de la misma sencillez, anda, voltea intentando exprimir la parte más bella de cada detalle.

Ha trabajado para distintas empresas como fotógrafo, también para el escultor barcelonés Álex Berned desde hace tres años y medio.

Actualmente, trabaja como free- lance, como fotógrafo y diseñador gráfico (su formación es totalmente autodidacta en este ámbito).